CUANDO
EL BURRO FUE REY DE LOS ANIMALES
En un
lejano lugar, donde el rey no siempre
era el león, donde la democracia había imperado
y la armonía era manifiesta, donde no existía el hambre y el poder
económico era el vigilante de la vida de la selva, se convocaron elecciones
para nombrar al nuevo rey de los animales. Todos estaban alegres porque por
medio de las votaciones podían manifestar sus ideas y necesidades. Era un acto
cívico de mucho valor para todos los habitantes de aquella jungla.
Ya había
sido Rey el chacal, el lobo, el zorro, el perro y otros más; y cada uno había
servido fielmente a las leyes económicas del reino. Por lo que para nombrar al
nuevo rey se harían encuestas entre los animales para saber quien tenía mayor
popularidad, de esta forma los habitantes del reino quedarían satisfechos. Así
que para empezar a planear las campañas, en un valle solitario, se reunieron
representantes de todas las especies; asistieron las familias más ricas y
respetadas, pero también los más
tramposos de la comarca.
Entre
los invitados a la fiesta de planeación estaban el zorro que ya había sido rey,
una chimpancé que tenía mucho poder por ser dirigente del sindicato de ovejas,
el perro que era el actual rey, el hijo del tigre que representaba el consorcio televisivo más grande de todos los animales y
el séquito imperial que regía los destinos del reino.
Después
de realizar el protocolo de recepción y dar la bienvenida a los invitados, el hijo
del tigre dijo: __Compañeros animales, ya
se acerca el cambio del rey y, nosotros como representantes del poder económico
que ha regido nuestras vidas, los invito a que pensemos a conciencia en quien
vamos a depositar la confianza de
nuestro reinado__. __ ¡Siiiiiiiii!
__ Aullaron y rugieron los animales,
todos estaban eufóricos y felices por el
vino y las viandas repartidas. Cuando la euforia había pasado la chimpancé
lanzó chillidos ensordecedores para atraer la atención y cuando se hizo
silencio dijo: __Estamos de acuerdo,
tengan la seguridad de que toda la estructura sindical será usada para nuestra
causa. De una u otra forma yo buscaré la estrategia para que nuestros intereses sigan
protegiéndose como hasta ahora. ¡No importa el costo político!__ __¡¡¡¡Bravo!!!!
¡¡¡¡Bravo!!!! __exclamaron todos.
__Compañeros y compañeras, animalillos y
animalillas, no debemos olvidar que nuestros intereses deben estar seguros como
hasta ahora; Yo los cuidé muy bien cuando fui rey y el que me sucedió en el trono ha cuidado de nosotros
como lo que es, un perro fiel, un guardián del poder económico.__ Dijo con
voz potente el zorro.
Bien amigos, __dijo el hijo del tigre__ como ya nos pusimos de acuerdo ahora
propongo que en esta vez sea el burro el rey de los animales__ ya que con su
nombramiento tendremos segura la continuidad y además el será un excelente rey__
El perro que hasta entonces había estado callado en un sonoro ladrido dio su
opinión__ Distinguido representante del
poder económico, yo pensé que en esta ocasión se iba a nombrar a otro animal, a
una hembra por ejemplo; para que haya equidad de género… Y pensé que iba a ser
una candidata diferente…__
__No te preocupes pilluelo habrá
una candidata diferente, pero el rey será el burro__. Terminó rugiendo el hijo del
tigre.
__¡¡¡Así sea!!!, ¡¡¡siiiiiiiii!!!,
¡¡¡siiiiiiii!!!__.
Gritaban los asistentes. El burro que se encontraba cerca no podía dar crédito
a lo que escuchaba, sacudía y sacudía las orejas como si una mosca se quisiera posar sobre su rostro; Pero armándose de valor, sacudió más fuerte sus
orejas y resoplando se paró frente a
todos para hablar con rebuznido tembloroso: __Compañeros animales, yo no sirvo para eso, se me olvida todo, no me
acuerdo ni de qué murió mi última compañera, yo no se hablar inglés, además
estoy muy peludo y mi prestigio está por los suelos porque cuando me enojo
agarro a patadas a los que me reclaman algo.
¡Me gusta pisotear a los demás!__.
¡Ay burro!, ¡ay burro!, no te preocupes
__dijo conciliador el hijo del tigre__ Mira,
lo de tu última compañera, ya inventaremos una historia, si se te olvidan las
cosas, no hay problema, en el mundo de la farándula hay unos aparatitos que
usan los actores para que se les dicte el guión. Eso te ayudará; y lo del
inglés pues te buscamos intérpretes. Ahora, lo peludo, va a ser trabajo de los
maquillistas de mi empresa televisiva, con tanto pelo que tienes te haremos un
lindo copete que el mismo Elvis Presley te va a envidiar. Lo último si va a
estar difícil porque ni modos que te quitemos las pezuñas, pero con una buena campaña de mercadotecnia en
la televisión hará que los que te odian te vuelvan a amar, ¡ya verás burro!__. Mientras
el hijo del tigre le pasaba la zarpa por la crin siguió diciéndole __ Lo único que te voy a pedir es que obedezcas
a los de imagen de mi empresa; para empezar te buscaremos una novia y te
casaremos. Aunque parezca incompatible te casaremos con una gaviota, ella es actriz y a tu lado podemos escribir
una historia de telenovela. Ya verás
burro, Ya verás…__
En otras
latitudes, más allá de las selvas. En lo profundo del océano, los animales
acuáticos sostenían una acalorada discusión. El problema en cuestión era que
los animales de la selva no invitaron a estas especies porque no podían sobrevivir fuera del agua.
Todos estaban conscientes de sus limitantes pero sabían que el derecho les
asistía. Entre los animales acuáticos había una especie rara, su cuerpo era de pez
pero las características de su cabeza era de lagarto, por ello se les conocía con
el nombre de pejelagartos. Quien representaba esta especie era carismático,
justiciero, protector y de sensibilidad
animal; gran luchador social y reconocido por todos su congéneres. De hecho era
líder natural de todos los animales desamparados. __Compañeroj__ Dijo el peje__ loj animalej de la selva están haciendo un
compló’ en nuestra contra, nosotroj
también tenemoj derecho de goberná’ este reino que también es nuejtro. No
debemoj permití’ que la mafia que tiene secuestrado a nuestro pueblo noj
imponga un rey, y menoj al burro que no sabe na’a. Denme la oportunidá’ para sé’
el rey de loj animalej y lej prometo que habrá prosperidá en nuestro reino__. Un
estruendoso aplauso invadió hasta la última grieta marina, el peje como le
decían cariñosamente lanzaría su candidatura para rey de los animales. A partir
de ese momento se reunieron los científicos
más prominentes, su proyecto primordial era crear un traje que
protegiera a su candidato cuando éste saliera del agua, cuidando que su vida no
peligrara durante el tiempo que estuviera en tierra. Cuando estuvo el traje, el
peje empezó a visitar a todas las especies terrestres. Se dio cuenta que en el
reino de la selva había muchas necesidades y que muchos animales morían de
hambre por la voracidad del poder
económico. En las aldeas que visitaba se notaba que tocaba las fibras
más íntimas de los habitantes con los mensajes que dejaba; su discurso era
sobre realidad selvática. __Compañeroj__ decía el peje__ No vamoj a permití’ que la oligarquía en el
poder nos manipule, quiero que sepan que yo cuando sea rey gobernaré con los
pobrej porque en mi gobierno los pobrej
serán primero___ .Cada visita a cada aldea
era de reuniones multitudinarias: El peje ganaba simpatizantes; el poder
económico sentía que su enemigo se hacía fuerte y difícil de vencer.
Todos
los habitantes de la selva estaban atentos a los acontecimientos de ambos
candidatos; cada paso que daban era de
dominio público; las encuestas pagadas por el poder económico arrojaban resultados
que daban como virtual ganador al burro.
Un día
los asesores de campaña del burro, instruidos por el hijo del tigre, decidieron
visitar las universidades selváticas, ahí se preparaban animales jóvenes para
un mejor futuro. La primera que visitaron fue la universidad “limero avellana”,
lugar del cual fue corrido el burro por su ignorancia y su turbio pasado. El
burro salió huyendo mientras los estudiantes gritaban __“fuera el burro” fuera el burro”__. A partir de esa fecha todos los
estudiantes universitarios de la selva
emprendieron una campaña en contra del burro; una de las organizaciones que
aglutinaba a los inconformes se denominaba “#yo soy=que vos”, que junto con la
organización que impulsaba al peje realizaron marchas y plantones en contra del
burro.
Las elecciones
llegaron, todos los habitantes de la selva esperaban los resultados, el burro
nervioso preguntaba al hijo del tigre. __Oye
tigrillo ¿crees que los habitantes de la selva voten por mi__? ___Por supuesto
burro, ___rugió el hijo del tigre__ ya todo está arreglado. En las tiendas se
regaló dinero y las minas “Ónix” también invirtieron mucho para que ganes. Además personalmente me
encargué de ponerme de acuerdo con el gato que es el jefe de los árbitros de la
contienda; no te preocupes burro, tú vas a ser el ganador, tú vas a ser el rey
de los animales__.
Y como
lo auguró el hijo del tigre, al terminar el conteo de votos, el gato quien era
el jefe, dio a conocer el triunfo del burro. Los seguidores del pejelagarto
consideraron la jornada como fraude electoral por la inequidad en la contienda;
pero nada se pudo hacer, como los acuáticos no podían salir a la superficie, el
peje decidió mantenerse al margen y continuar con la vida de armonía que imperaba
en la selva. Para darlo a conocer hizo una gran concentración en el centro de
la jungla y así habló a sus seguidores: __"Por máj que noj haya dolido ejte
fraude, no debe habé’ motivo para el dejaliento o la rendición... debemoj
sentirnoj orgulloso’ de tenej la encomienda de regenerá’ la vida pública y
lográ’ el renacimiento de nuejtra selva.” __
Así fue
como el burro fue rey de los animales. Sus burradas fueron el denominador común
de su reinado y el poder económico fue feliz con los resultados. El pejelagarto
formó un nuevo partido político con los animales que lo apoyaban y espera que
con el tiempo en la selva haya un cambio verdadero.
Edmundo Rivera Escamilla
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